El tramo de Bahia de los angeles hacia el entronque con la carretera 1 estuvo de miedo, no por la soledad de la misma, ni porque se nos haya atravesado algún animal, no, el aire que estaba haciendo nos hizo la vida de cuadritos, al grado de que Roberto y Arturo casi tocan suelo, veníamos de lado y justo cuando nos habíamos acostumbrado, llega una ráfaga de aire del lado contrario que casi nos tira.
Una vez llegando a la carretera 1 el aire bajo bastante, pero aun asi estuvo dando lata todo el camino hasta Ensenada.
Llegamos ya tarde, yo no tenia ni idea de que hora era, con tanto cambio de horario la verdad es que ya tenia el reloj biológico medio hecho bolas. Paramos en el malecón a tomar unas fotos, la zona turística esta muy bonita, daban ganas de quedarse a dar la vuelta un rato, pero al otro dia salíamos a Puerto Peñasco y era ruta larga, nos esperaba Tecate, Mexicalli, La rumorosa y otro pedazo de rectas asi que había que dormir.
Encontramos hotel rápido pero la gente de Ensenada dejo mucho que desear, no se si era la hospitalidad a la que nos habíamos acostumbrado en la Baja o de plano son asi, pero el señor del hotel nos puso muchas trabas para dejarnos un cuarto y aparte tuvimos que dejar deposito para las toallas y las llaves, salimos a cenar el riguroso sándwich del Oxxo y a dormir.
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